
El pasado jueves, el Palacio de Congresos Europa de Vitoria se convirtió en el epicentro de una emoción primorosa: la presentación de la décima edición deMasterChef Celebrity en el FesTVal. La alfombra naranja brilló bajo los focos y las miradas cómplices de una ciudad que, por decimoséptimo año consecutivo, ha abrazado de nuevo lo mejor de la televisión. Allí desfiló elelenco de los concursantes que forman parte de esta edición —Juanjo Bona, Valeria Ros, José Manuel Parada, Soraya Arnelas, Alejo Sauras, Rosa Benito, Miguel Torres, Mala Rodríguez, Quique Torito, Mariló Montero, Necko Vidal, Masi, Charo Reina, David Amor, Valeria Vegas y Jorge Luengo— acompañados por el trío indomable del talento culinario: Pepe Rodríguez, Samantha VallejoNágera yJordi Cruz.
Un dato reluciente y prácticamente histórico abrió el acto: el estreno del programa había marcado un 16,4 % de cuota de pantalla, posicionándose, así, como mejor estreno con respecto al del año pasado. También fue destacable el dato de que ha sido la primera opción para todos los públicos, de 13 a 64 años, y reunió a más de 3129 millones de espectadores, el mejor arranque en dos años. María Eizaguirre, directora de Comunicación y Participación de RTVE, lo definió con buen pulso: «La 1 está imparable».
Aunque, si hay que destacar algo mencionado en la presentación es que esta edición promete ser verdaderamente histórica no solo por el gran elenco que lo conforma, sino porque es una edición «marcada por la locura, por el juego, la diversión. Una narración que es espectacular, las tramas y que hay mucho show».
Entre risas, recuerdos y pinceladas de nervios

Aunque esta edición cuenta con un cast verdaderamente destacable y todos son protagonistas, sobre la alfombra, la atención cobró vida especialmente frente a Juanjo Bona, el joven artista que está revolucionando el panorama musical nacional. Esta escena él la recibió entre asombro y gratitud: «no me llego a creer todo esto», confesó con la modestia encantadora que lo caracteriza.
En el auditorio, los concursantes cultivaron breves confidencias que pintaron su experiencia de matices diversos: Alejo Sauras habló de su condición competitiva; Miguel Torres reconoció que el deporte le ha proporcionado «herramientas para vivirla de la mejor manera posible»; Torito se mostró exultante con su característico desperpajo: «me lo he pasado bomba. He llorado, he gritado… y no siempre por la cebolla»; José Manuel Parada, gran figura de la televisión española,celebró no haber sido eliminado «por cocinar de forma tan tradicional». Juanjo Bona se definió fan absoluto del programa desde pequeño, de hecho, él ya había intentado entrar en la edición junio, y califica este casting como «icónico»; Soraya Arnelas, muy emocionada, mencionó lo ha sentido como «el programa más increíble que he vivido»; Rosa Benito expresó sentirse «feliz de pertenecer a esta familia, porque sufres, lloras, ríes, te enseñan a cocinar y a amar la cocina…»; Mala Rodríguez, con ironía cálida, bromeó sobre las «comidas asquerosísimas»que ha tenido que probar el jurado, mientras Charo Reinaelevó el trío de jueces como «lo mejor del programa»; Valeria Vegas resaltó que «en este casting hay mucha verdad»; y el mago Jorge Luengo se declaró agradecido y conmovido por haber sido escogido para una marca «tan grande de entretenimiento».
Voces y brillos en la puesta de largo
Miriam García Corrales, directora de Entretenimiento en RTVE, trenzó palabras generosas: «emociones, desafíos, humor, grandes exteriores…», haciendo de este modo que la gente se enganche aún más a esta edición, si cabe. Macarena Rey, CEO de Shine Iberia, extendió ese agradecimiento a RTVE, cómplice en este formato vibrante.
Pepe Rodríguez, el crítico más compasivo, describió esta edición como la más desinhibida: «hacer MasterChef es un lujo, es un placer […]. No solo hablamos de cocina, hablamos de emociones, de sentimientos […] Aparecen todas las cosas que hay en la vida, que hay en la sociedad, es llanto, emoción, risa, talento, […] Ha pasado de todo, es la vida misma metida en un programa de televisión»; Samantha añadió que ha sido «la revolución total, no gastronómica, bueno, también gastronómica porque hemos innovado mucho a la hora de crear gastronómicamente. […] Ha sido una edición muy divertida»; Jordi Cruz, fiel al espíritu, alabó el entusiasmo de todos: «hacemos que os guste, que la disfrutéis y lo paséis bien».
Una edición innovadora y llena de desafíos
La décima entrega de MasterChef Celebrity promete ser un carrusel de sorpresas: cocinarán en gravedad cero, crearán platos con ayuda de inteligencia artificial y se enfrentarán a retos con air fryer. Asimismo, cocinarán junto a los chefs más relevantes del país y estarán también acompañados de grandes invitados.
En definitiva, es una edición que nadie puede perderse.
MasterChef: una llama que no se apaga
La presentación de la décima edición de MasterChefCelebrity en Vitoria fue más que un arranque: fue un canto a la expectativa, la emoción y la creatividad. Fluyó con naturalidad entre risas, lágrimas, reflexiones y extravagancias, con un elenco de personalidades entregadas y un jurado que actúa como corazón latente del formato. Con nuevos desafíos, invitados de lujo e ingredientes tecnológicos, esta edición se dibuja prometiendo honrar su legado, elevarlo por todo lo alto y renovar su relato con fuerza y sabor. El talent culinario no pretende, simplemente, repetir fórmulas de éxito. Quiere reinventarse, emocionar y, sobre todo, cocinar momentos inolvidables.
Ese jueves, la alfombra naranja se tiñó de magia televisiva: un momento digno de ser contado y saboreado.