El dúo de pop alternativo estadounidense compuesto por Tyler Joseph y Josh Dun ha pasado este 22 de abril por primera vez por el Palau Sant Jordi a raíz de su último disco —el sexto publicado con discográfica—, Clancy.
The Clancy World Tour ha vuelto a reunir a los fanáticos de este dúo musical en salas de conciertos llenas de pasión. Han sido largas horas de cola para aquellos aficionados que han optado por la zona de pista, algunos incluso confirman haber dormido ante las puertas para asegurar un buen sitio. Una cola tan larga que perfectamente podría haber dado toda la vuelta al Palau. Mientras esperaban, los fans se preparaban y pintaban la piel de negro como Tyler, el vocalista y pianista —cuyos brazos y cuello están completamente tatuados con un blackout— y la vestimenta no podía ser más que otra que de negro, rojo y amarillo.
Tras la actuación de su telonero, Balu Brigada, el telón cae y Josh Dun, el batería, inicia el concierto con un solo de batería impresionante mientras espera a su compañero, que entra saltando al escenario junto con unos petardos. Overcompensate es la primera canción en resonar por todo el Palau, tanto por la increíble percusión de este dúo como por la gente cantando y gritando las letras.
Le sigue Holding On To You —del disco Vessel— con Josh acompañando a Tyler encima del piano, y terminando haciendo un mortal que solo hace que los fans se vuelvan más locos. Y con Vignette la euforia sigue estando por las nubes. Twenty one pilots vuelven a recordar su segundo disco con Car Radio, y a medida que la canción avanza y el público sigue cantando, de repente todo se vuelve oscuro y todo los focos, literalmente, se centran en la zona superior de las últimas secciones. Ahí, rodeado de sus fans, se encuentra Tyler que ha aparecido por arte de magia cuando justo un segundo atrás estaba en el escenario junto a su compañero.
Tras esta aparición mágica, el grupo se desvanece y los fans esperan con sonrisas dibujadas en la cara. Las pantallas frontales del escenario muestran un pequeño documental de la cola de ese día, imágenes de los seguidores vistiéndose, mostrando sus atuendos creados por y para ese concierto. Con la canción de The Judge cantada por la gente del video, el público se une a cantarla hasta que ambos vuelven al escenario para hacerlo todos juntos.
Tyler ofrece unas bonitas palabras hacia los aficionados, ahora ya sin pasamontañas:
«Voy a deciros algo, os véis espectaculares y cantáis genial. Estamos muy emocionados de estar en este escenario esta noche. De hecho, no queremos estar en ningún otro lugar del mundo que no sea aquí, en Barcelona. Así que, hagamos de esta una noche increíble».
Las linternas de los teléfonos iluminan el Palau con las primeras notas de The Craving (Jenna’s Version) y así siguen hasta Tear My Heart. Las luces de colores vuelven a brillar con Backslide y ambos componentes del dúo cantan cara a cara con un piano y una batería electrónica Shy Away, canción del disco Scaled and Icy.
Con el final de la canción, Tyler indica al público gritar «Watch it», preparándolos así para la canción Heathens, mundialmente conocida por ser parte de la banda sonora de la película de Escuadrón Suicida. La gente canta incluso aún más fuerte y se hacen con la energía de Tyler y Josh. Toda la pista alza los brazos y se mueve al ritmo de la música, la imagen es imponente. Y tras esa escena tan llena de potencia, todo se calma al ritmo de Next Semester.
Un espectáculo inmersivo: escenarios múltiples y conexión total con el público
Una de las muchas características de este concierto, aparte de su impresionante producción y escenario, es el añadido de otros dos escenarios individuales en el centro de la pista. Josh se mueve por la izquierda, caminando por un pasillo hecho por los fans hasta llegar a su preciada batería. Routine in the Night empieza con Josh en la batería y Tyler se acerca lentamente por la derecha mientras canta, finalmente se une a su piano en su propio escenario y seguidamente cantan The Line. Esta última eleva a Tyler mientras toca las notas de la canción que forma parte de la banda sonora de la última temporada de Arcane (serie basada en el juego de League of Legends). Terminan su sección en el escenario B con Mulberry Street —con la cual en un momento frena y dice al micrófono «A veces me equivoco de notas». Con este divertido inciso, Tyler juega con las luces de los fans. Organiza al público para levantar las linternas de los teléfonos al ritmo de la letra, asignando una palabra por sección, uniendo así a todos los que se encuentran en el Palau.
El fuego ilumina el escenario: una explosión de emociones y música
De repente, Josh aparece en las gradas de la zona derecha vestido con un mono verde con unas cruces amarillas, lleva en mano una chaqueta negra con líneas rojas para dársela a Tyler. Al volver al escenario principal, nos encontramos con una escena diferente, un escenario cambiado. Algo que parecen unos tubos de escape simbolizan una ciudad gobernada por nueve obispos liderados por Nico, de ahí la canción Nico and the Niners. Clancy es quien intenta escapar de esta ciudad y recibe la ayuda de los Bandito —Tyler y Josh son estos—. Todo el suelo está inundado por humo, una escena que pone la piel de gallina cuando sobre todo una barrera de fuego se alza enfrente de las fábricas. Solo ese ardiente fuego ilumina el escenario y Tyler y Josh lo observan desde la distancia y después van con lentitud hacia sus instrumentos.
El concierto prosigue con Navigating, Nico and the Niners y Heavydirtysoul y los asistentes gritan de la emoción al ver a Josh quitándose la sudadera y dejando a la vista una camiseta que pone “BARCELONA”. Con ese nuevo atuendo cantan My Blood y el Palau se llena de euforia al escuchar Doubt, pero la versión demo. Una versión que recientemente se ha añadido a las plataformas digitales gracias a que los fanáticos llevaban tiempo pidiéndola. Una canción que se ha hecho viral en redes sociales. Tras anunciar la publicación de la demo en un concierto en este tour, la versión original se cambió por la demo en los conciertos que prosiguieron. Siguieron con Guns for Hand y en Lavish, tras hacer el tonto en el escenario con ambos componentes caminando sensualmente con unas gafas rojas en forma de corazón, Josh lanzó la camiseta que había lucido por las últimas canciones, quedándose así con el torso desnudo por lo que quedó de concierto.
Momentos inolvidables y cierre épico en el debut barcelonés de Twenty One Pilots
De nuevo emprenden la marcha hacia el escenario B y Tyler canta uno de los hits que todo el mundo se debe saber, Ride, aunque a media canción invita a un niño a ayudarlo a cantar el estribillo. Tras el hit el concierto poco a poco llega a su fin, pero eso no impide que el público disfrute de cada segundo. Ambos vuelven al escenario. Tyler y Josh cantan Paladin Strait dándose la espalda, escuchamos la voz de Josh Dun, que bien se sabe que no es el vocalista principal y sus fans saben que le genera mucha inseguridad cantar. Su voz grave hace que todo el público grite de emoción y en un momento Josh está encima del público, sí, encima del público tocando la batería sujetado por los fans. Con Jumpsuit y Midwest Indigo van cerrando el concierto. Pero no antes sin cantar Stressed Out, otro de sus famosos hits.
Las luces se apagan, y el público no se mueve de sus asientos, simplemente esperan. Rezan para que no se haya terminado. Con un estruendoso grito de los fanáticos, Twenty one pilots vuelve al escenario con una petición. Han dibujado un círculo rojo en medio de la pista que se debe vaciar. El público se echa para atrás intentando crear un círculo perfecto, a lo que Tyler confirma que «Puedo decir que este es mejor que el del último concierto», el de Madrid.
Ambos componentes caminan hacia el círculo y al subirse en unas minúsculas plataformas, los fans corren hacia ellos. Son uno con los fans. Y así, tan cercanos al público, tras un concierto con una tremenda producción audiovisual y auditiva, Tyler y Josh terminan con Trees, al ritmo de unos tambores aguantados por los fans en medio de la pista del concierto en Barcelona de The Clancy World Tour.
